Satyrium hircinum L.
Geófito. Planta herbácea, glabra. Tubérculos de 4 cm de diámetro, subglobosos. Escapo de hasta 75 cm de longitud, erectos, verde con manchas rojizas. Hojas basales 4-6, 5-15 x 3-5 cm, patentes, elípticas, obtusas, nervio central marcado. Hojas superiores más pequeñas, envainadoras, lanceoladas, agudas, acuminadas. Inflorescencia en espiga, de hasta 35 cm de longitud, con 40-70 flores. Brácteas inferiores de hasta 30 mm de longitud, las superiores menores, verdoso-amarillentas, lineares, agudas. Flores colgantes. Sépalos 7-10 mm de longitud, verdosos, ovales, conniventes con los pétalos formando una gálea. Labelo 5-7 mm de longitud, verde-blanquecino, trilobulado, lóbulos laterales 8-14 mm de longitud, lineares, lóbulo central 4,5-5,5 cm de longitud, enrrollado helicoidalmente, con el extremo bífido. Ovario 10-12 mm de longitud, retorcido, pedicelado.
Vive en pastizales con cierta compensación edáfica, dentro del piso mesomediterráneo con ombrótipo semiárido. Convive con Artemisia herba-alba, Brachypodium retusum, Salsola genistoides, etc.
Elemento de distribución mediterránea occidental y euroatlántica. En Murcia se encuentra en Sierra Espuña, donde se situa en las inmediaciones de la Ermita de Santa Eulalia (Aledo).
Sólo se conoce un ejemplar que floreció en el año 2000, pero no lo hizo en 2001. Es probable que se encuentre en otros lugares de la Sierra incluso más favorables para su desarrollo, lo que unido a que no se trata de una especie endémica, no aconsejan, por el momento, considerarla en la categoría de en peligro de extinción. Debe realizarse un muestreo en lugares adyacentes con el objetivo de localizar nuevos ejemplares. Como medida cautelar es aconsejable recolectar semillas para su posible cultivo in vitro. Existe la posibilidad de "importar" ejemplares de otras comunidades autónomas cercanas en las que se han estudiado las poblaciones de la especie.
Especie variable que en la bibliografía especializada suele tratarse en diversas subespecies.