Terófito. Planta herbácea, anual. Tallos hasta 150 cm de longitud, erectos, ramificados o simples, con indumento de pelos retrorsos en la zona basal. Hojas basales hasta 30 cm de longitud, de dentadas a pinnatisectas. Hojas caulinares menores, de pinnatífidas a enteras. Inflorescencia en racimo. Flores tetrámeras, ebracteadas. Pedicelos de hasta 7 mm de longitud en la fructificación. Sépalos hasta 3,5 mm de longitud, erecto-patentes. Pétalos hasta 7 mm de longitud, amarillos, uña larga. Fruto en silícula, artejo inferior hasta 2 x 1,5 mm, cónico, artejo superior hasta 12 x 8 mm, globoso, con ocho costillas aladas. Semillas elipsoidales.
Vive en herbazales nitrificados, prados terofíticos y ocasionalmente en cultivos de secano sobre suelos margoyesíferos dentro de los pisos termo-mesomediterráneo con ombrótipo semiárido-seco. Son especies acompañantes Asteriscus aquaticus, Chaenorrhinum rupestre, Diplotaxis harra subsp. lagascana, Lycocarpus fugax, Moricandia moricandioides, Rapistrum rugosum, etc.
Endemismo del Sudeste Ibérico con óptimo en la Provincia Murciano-Almeriense, aunque con algunas poblaciones en otros puntos de Albacete, Alicante y Valencia. En Murcia la mayor parte de las poblaciones están distribuidas desde las sierras prelitorales (Altaona, El Puerto) hasta el interior: Sierra de la Pila, Sierra del Molino (Calasparra), Sierra de la Pinosa (Caravaca), La Salinica, Presa del Cenajo (Moratalla), Monteagudo (Murcia), Cabezuela Gorda (Totana), etc.
Por tratarse de una especie anual las poblaciones son muy fluctuantes dependiendo de las lluvias, por lo que se hace difícil cualquier plan de conservación. Diversos lugares en los que se encuentra están catalogados como LICs. Sin embargo, debe garantizarse la permanencia de un número determinado de poblaciones, debido a que algunas de estas zonas son roturadas para el establecimiento de nuevos cultivos.